Los que pasáis por mi blog de vez en cuando, sabréis que a menudo, una o dos veces al año para no pasarme, escribo algo en tono mucho más personal y cercano, y el post de hoy, lo es.

Me ha impulsado a ello una frase con la que contesté a un empresario amigo: «(…) porque no es igual escuchar para dar una respuesta, que para aprehender la otredad… » La pregunta carece de toda importancia y en realidad podría ser cualquier cosa relacionada con el marketing digital, el social media, etc. Pero, como filóloga que fui y siempre seré, me quedé atrapada en esa hermosa palabra «la otredad»… Empatía…

Ya sé que la frase podría dar para un post mucho más técnico e interesante, pero no van por ahí los tiros hoy, -esto lo aviso para no hacer perder el tiempo, que todos andamos en números rojos siempre con él.

El hecho es que yo misma me paro y pienso si es lo que hago, si es lo que estoy haciendo últimamente que no tengo tiempo ni para pensar en lo importante de mi vida, que son las personas que me soportan cuando llego a casa sin energías. Es algo que todos experimentamos de una u otra forma.

El día que me decidí a abrir este blog, lo hice porque pensé que ya era hora de tener mi propio blog después de haber trabajado para proyectos y empresas como Dircom. Y no quisiera que ese espíritu se pierda en el camino, en casi cuatro años de evolución en este blog y profesional que me han ido restando tiempo y dedicación para compartir lo que más me gusta, que no es otra cosa que pensamientos, historias, experiencias, consejos, información etc.

Así que cuando le respondí la frasecilla a mi amigo, no pude menos que pararme a pensar en todo esto, en lo que ahora llamamos «marca personal», en el tiempo y dedicación, en los conocimientos, en las horas, las críticas, los éxitos y los fracasos, y todo ello, todo, me lleva a donde hoy estoy: en esta pequeña ventana al mundo digital por la que se cuelan mis palabras en vuestras vidas digitales.

Y no, no creo que lo online sea ajeno a lo offline: he tenido la suerte de conocer a muchas personas que me han demostrado que lo humano y lo digital van tan de la mano como la comunicación y la vida.

Ahora tengo mucho menos tiempo para escribir posts; hace algunos años ya que dejé el community management por la estrategia, pero tengo la suerte de contar con un equipo maravilloso que siempre está ahí para recordarme que toda estrategia, tiene que implementarse, y esa implementación es el toque humano que afortunadamente, sigo apreciando más que ninguna otra cosa y me sigue enseñando a valorar cada minuto de mi vida ya sea digital o analógica…

Así que aquí sigo, delante de mi ordenador un domingo cualquiera, con un acentuado día emotivo sin que haya una razón lógica más allá de que vosotros, a menudo, os pasáis por aquí.

Gracias a todos, y si habéis llegado hasta el fin del artículo, dobles gracias, porque menudo rollo os he soltado… Un post nada típico de una CEO de agencia de Marketing Digital… Pero antes que eso, yo sigo siendo @doloresvela.

Share This

Share This

Share this post with your friends!

Share This

Share this post with your friends!